“La vida con el tenis”
Conozco el tenis desde que tengo uso de razón, a los tres años ya tenía una raqueta en la mano. Mi abuelo y mi padre, ambos entrenadores y jugadores, fueron los que me enseñaron. Mi hermana y yo disfrutamos del tenis desde muy pequeños. Mis padres nos inculcaron todos los valores del tenis. Somos una familia de tenistas.
Como jugador estuve en varias escuelas, jugando torneos y liga en varios equipos. Gracias a todo ello pude hacer amigos, y sobre todo aprendí a auto gestionarme, y superarme en cualquier situación.
Tras años compitiendo, empecé a trabajar dando clase de tenis. Inicialmente lo compatibilizaba con los entrenamientos propios y la competición. Tenía que organizar muy bien mi tiempo porque también tenía que estudiar y aunque todo era muy atractivo, no era fácil.
He asistido a varios cursos de entrenador, he ido mejorando con mi trabajo diario y he sido y soy capitán de equipos de tenis.
Gracias a ello aprendí a liderar un equipo y a organizarme. La formación es tan importante … Y nunca dejamos de aprender.
Los valores del deporte me han ayudado no solo en mi vida tenística, sino en mi vida personal y en mi vida académica. La constancia en un deporte ayuda y mucho, a la hora de hacer una carrera y un Master.
Años más tarde llegué al Chamartín. Una escuela de prestigio en un club de prestigio.
Estoy muy orgulloso en ser parte de este equipo. Un equipo que es como mi familia. Me siento como en casa. Pero, si el profesorado es excelente, lo son aún mucho mas sus alumnos.
Es obligado daros un consejo, por experiencia propia: “Juega al tenis, porque el tenis te va a aportar mucho más de lo que te imaginas”.
